Ha pasado ya un año desde que tomé esta foto. Y hace un año y dos días, exactamente, que te marchaste.
16 de abril de 2022. Por fin en casa, después de la más triste despedida. Cuatro de la mañana e imposible pegar ojo. Bicheando en el grupo de quedadas fotográficas de Telegram, el compi Víctor compartió la ubicación de la puesta de la luna sobre las torres.
– Total, quedan sólo un par de horas -, pensé. Tiempo suficiente para preparar el trípode y el equipo, localizar el punto en Google Maps y acercarme a ver desaparecer la luna y salir el sol en Paracuellos del Jarama.
Vamos, venimos. Llegamos y nos vamos. La luna nos observa. Nos acompaña. Nos consuela. Solo hay que observarla. Ahí está. Para tí.
🌕 Puesta de luna 📍 Paracuellos del Jarama 🗺 Plani: @valvgar
Gracias, Víctor, por la planificación. La luna del 16 de abril de 2022 fue mi consuelo.
Si te gusta la fotografía nocturna, el desierto es tu paraíso.
En Wadi Rum pude vivir la sensación de estar sola en medio de la noche, rodeada de arena y silencio, con el cielo estrellado como única compañía.
Una noche en el desierto
Cuando el sol se pone y la oscuridad se apodera del desierto, se abre un nuevo mundo ante mis ojos. Un mundo donde la vía láctea se muestra en todo su esplendor, como una banda de diamantes que cruza el firmamento.
Consejos para fotografiar la Vía Láctea
Para fotografiar la vía láctea con una cámara réflex, necesitas tener en cuenta algunos parámetros importantes, como la apertura, la velocidad de obturación, el ISO y el enfoque.
Usa un objetivo angular y luminoso, preferiblemente con una apertura de f/2.8 o menor.
Ajusta el ISO entre 1600 y 6400, dependiendo de la cantidad de luz que haya y del ruido que pueda generar tu cámara.
Pon la velocidad de obturación máxima de 20 segundos, para evitar que las estrellas salgan movidas por la rotación de la Tierra.
Abre el diafragma al máximo que te permita tu objetivo, para captar la mayor cantidad de luz posible.
Enfoca a una estrella brillante usando el modo manual de tu cámara. Puedes usar el live view para ampliar la imagen y ajustar el enfoque con precisión.
Usa un trípode firme y estable, y un disparador remoto o el temporizador de tu cámara, para evitar vibraciones que puedan arruinar tu foto.
Dispara en formato RAW para tener margen de edición.
¿Cómo encontrar el centro galáctico de la Vía Láctea?
El centro galáctico es el centro de rotación de nuestra galaxia, la Vía Láctea. En él se encuentra un agujero negro supermasivo llamado Sagitario A. Para encontrar el centro galáctico, debes mirar hacia la constelación de Sagitario, donde la Vía Láctea parece más brillante. Aquí tienes algunas recomendaciones:
El centro galáctico no es visible durante todo el año, sino que depende del hemisferio en el que te encuentres y de la estación del año.
Si estás en el hemisferio norte, puedes verlo de marzo a octubre, siendo más visible entre abril y julio. Si estás en el hemisferio sur, puedes verlo de febrero a octubre, excepto de noviembre a enero.
Te recomiendo usar alguna aplicación o programa que te ayude a localizar el centro galáctico en el cielo, como PhotoPills.
Espero que estos consejos te sean útiles. Recuerda que la práctica es la madre de la habilidad, así que no te desanimes si no consigues la foto perfecta a la primera.
¿Qué fotógrafo no sueña con plasmar los colores del otoño en sus imágenes?
«El otoño es una sinfonía de colores, una armonía de tonalidades cálidas que anuncian la llegada del invierno» (Humberto Maturana)
Con este objetivo, puse rumbo hacia la Hoz de Pelegrina, situada unos 135 km. de Madrid, en la provincia de Guadalajara. Esta garganta natural, creada por el río Dulce, se abre paso a través de la roca creando un paisaje único.
La Hoz está enmarcada en el Parque Natural del Barranco del Río Dulce, un espacio natural protegido de gran valor ecológico. Declarado parque natural en 2003, está integrado en la red de espacios protegidos de la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha. Además, ha sido declarado Zona de Especial Protección para las Aves y Lugar de Interés Comunitario (CEE).
El Mirador de Félix Rodríguez de la Fuente
El mejor punto de vista del barranco es, sin duda, este mirador que está situado en la carretera GU-118, a 6,5 km. de Torremocha del Campo (dirección Sigüenza), o a 9,3 km. de Sigüenza (dirección Pelegrina).
Desde la altura, se puede apreciar la majestuosidad de la Hoz de Pelegrina. Las paredes de roca de la garganta se elevan a ambos lados del río Dulce, creando un cañón de más de 80 metros de altura en algunos puntos.
La vegetación de ribera está compuesta principalmente por chopos, álamos, sauces y fresnos, árboles todos ellos de hoja caduca. Durante esta época, las hojas cambian de color creando un espectáculo visual impresionante. Los verdes, amarillos y ocres tiñen la Hoz de Pelegrina convirtiéndola en una auténtica paleta de colores.
Después de desmontar el trípode, me siento a disfrutar del lugar. Con un poco de paciencia, se pueden apreciar de las diferentes especies de aves que habitan la zona. Las paredes del barranco son el hogar de buitres leonados, águilas reales o halcones peregrinos.
Es maravilloso saber que los vecinos de Pelegrina decidieron honrar la labor de Félix Rodríguez de la Fuente con la construcción de este mirador, en 1980. El Barranco del Río Dulce ha sido inmortalizado en muchas de las escenas que el naturalista grabó para su famosa serie documental «El Hombre y la Tierra». La Hoz de Pelegrina y los páramos que la rodean son conocidos por ser el hogar de muchas especies de fauna silvestre, incluyendo lobos, que fueron protagonistas de algunas de las escenas más memorables de la serie.
Este mirador es un recordatorio de su legado. Un lugar que nos permite conectar con la naturaleza, y valorar la importancia de trabajar para su conservación y protección.
No olvides planificar la hora de tu fotografía
Si vas a fotografiar la Hoz de Pelegrina desde el mirador, no olvides planificar la hora de la captura. El mirador está situado al este de la Hoz, por lo que es aconsejable visitarlo por la mañana, para tener la luz del sol, que ilumina el barranco, a tu espalda.
El sendero de la Hoz de Pelegrina
Aprovechando la visita mirador, decidí realizar un precioso recorrido en el parque natural, perfectamente señalizado, que arranca y finaliza en el pueblo de Peregrina. Para ello, tomé la senda que desciende hasta el río para disfrutar de esta ruta circular de dificultad baja (4 km. de longitud y 100 m de desnivel máximo).. Un maravilloso paseo de hora y media, apto para todos los públicos.
Durante la caminata, las paredes del barranco me parecieron susurrar historias, mientras la brisa jugaba a mecer las hojas de los árboles que crecen en sus orillas. La belleza del paisaje me invita a perderme en el camino. Cada rincón del sendero ofrece un nuevo encuadre. La explosión de color en la ribera crea un ambiente que es imposible no admirar, y que hace que uno se sienta en un lugar encantado.
🔊 Kike Bustos y Chechu Fotografía, con el apoyo de Foto Ruano y Photopills, organizaron una quedada libre para fotografiar la luna llena y las torres, desde las Rozas de Madrid, la tarde del día 10 de septiembre.
📷 ¡No podíamos faltar! Y allí estábamos más de 150 lunáticos, en el lugar indicado a la hora precisa, con la cámara montada sobre el trípode y el disparador en la mano, casi conteniendo la respiración…
📍 Como siempre, Photopills dio en el clavo. La luna no faltó a nuestra cita, y se elevó, majestuosa, en el punto exacto que marcaba la planificación.
😍 Pasamos un rato estupendo compartiendo impresiones con Rafael Pons, El Bardo de Photopills, y charlando con compañeros como Javier, Víctor, Amílcar o Raúl.
😳 Y, por cierto… sigo alucinando con el rango dinámico de mi A7III… ¡Qué barbaridad!
A menudo las fotografías son una fuente de inspiración para iniciar un viaje. Esos parajes espectaculares que vemos en documentales o en las redes sociales de otros fotógrafos, despiertan nuestra curiosidad y nos hacen soñar con estar allí.
El Hayedo de Otzarreta es, sin duda, uno de esos lugares inspiradores. Y visitarlo en otoño, se convirtió, para mí, en una prioridad.
Este pequeño bosque es conocido por su belleza natural y por la sensación de misterio que transmite, ya que está compuesto por árboles que se empinan hacia el cielo creando un ambiente de cuento de hadas.
Los hayas, con sus copas enmarañadas, forman un espectacular techo de hojas que filtra la luz del sol creando un ambiente mágico y sombrío. Se respira silencio y tranquilidad. Bajo su resguardo, te invade una sensación de protección que te hace sentir en paz. Es un lugar mágico y misterioso que conecta con tus cinco sentidos, y te invita a conectar con la naturaleza.
Capturando la imagen que has imaginado
El contraste de la luz exterior con la umbría del bosque fue un hándicap a la hora de tomar la fotografía. Visitarlo a última hora del día, para montar el trípode y disparar, en en la hora azul, fue todo un acierto. Los pocos visitantes que paseaban en el hayedo, un jueves del mes de octubre, desaparecieron con los últimos rayos de sol.
Como no podía ser de otra forma, la panorámica que tenía en mi cabeza me obligó a bajar al cauce del arroyo (Zubizabala Erreka) que cruza el bosque. En estos días de nuestra visita, el riachuelo apenas tenía caudal. La imponente haya, vista desde debajo, se erguía majestuosa ante mis ojos.
Mirando por pantalla, antes de apretar el disparador, pude apreciar cómo la combinación de colores complementarios del bosque creaba una armonía visual impactante, transmitiendo emociones y sensaciones.
El verde intenso de las copas de las hayas produce una sensación de frescura y vitalidad, mientras que el rojo oscuro de la alfombra de hojas caídas transmite una energía y pasión intensas. Una atmósfera mágica que sólo la naturaleza puede crear.
Localización
El hayedo de Otzarreta está ubicado en el Parque Natural de Gorbeia, en la comarca del Duranguesado, a unos 30 kilómetros de la ciudad de Bilbao.
Es importante tener en cuenta que, en temporada alta, el pequeño aparcamiento puede llenarse rápidamente, por lo que es aconsejable llegar a primera hora de la mañana, o a última de la tarde, para poder estacionar.
Aquí os dejo la ubicación exacta de este pequeño bosque, un lugar imprescindible en la «lista de deseos» de todo amante de la naturaleza.
«Los que sueñan por el día son conscientes de muchas más cosas que escapan a los que solo sueñan por la noche». (Edgar Alan Poe)
La fascinante belleza y misteriosa presencia de la luna llena ha cautivado a la humanidad durante siglos, convirtiéndose en una adicción irresistible para aquellos que buscan capturar su esplendor a través de la lente de una cámara.
Fotografiar la luna combinada con elementos terrestres (paisajes, monumentos o edificios) es el objetivo de los fotógrafos que nos consideramos «lunáticos«. Así, pues… ¿Qué mejor reto que fotografiar la luna llena sobre un molino manchego?
Planificar este tipo de fotografías de forma correcta implica localizar de forma exacta el lugar desde donde veremos elevarse la luna, siguiendo una trayectoria previamente calculada. Una vez allí, debemos verificar que no hay arboles, construcciones o colinas que dificulten la toma. Una vez montada la cámara sobre el trípode, toca esperar que llegue la hora prevista. Cuando por fin asoma sobre la figura del Molino Rucio, es casi imposible describir con palabras la sensación mágica que nos embarga. ¡Incluso el tiempo se ha detenido en ese instante para contemplar su belleza!
Salida de la luna del 9 de septiembre de 2022, sobre el Molino Rucio. Sony A73 + Sony 100-400 + duplicador. Imagen tomada a desde la CM-4116, a 3 km. de distancia del molino.
El origen de los molinos
Se cree que los molinos de Consuegra fueron construidos en el siglo XVI, durante la época de dominación islámica de la península ibérica.
En aquella época, los molinos de viento eran utilizados principalmente para moler el grano y producir harina. Con el tiempo, los molinos de Consuegra se convirtieron en un símbolo de la región de La Mancha apareciendo en varias obras literarias, como «Don Quijote de la Mancha» de Miguel de Cervantes.
El conjunto molinero mejor conservado de España
De los trece molinos originales, se han restaurado y conservado doce, lo que los convierte en uno de los mayores conjuntos de molinos de viento de toda Europa. Su construcción en la cima de una colina les proporciona una vista panorámica impresionante de los campos de La Mancha. Y le otorga una posición estratégica para aprovechar la energía del viento.
Cada molino tiene un nombre propio que refleja su historia y temática. Nuestro protagonista de hoy, el Molino Rucio, aparece en el libro Don Quijote de la Mancha como el molino a quien el Ingenioso Hidalgo creyó haber derrotado.
Anatomía de Grey fue la responsable de despertar mi interés por Seattle, una ciudad fascinante que me cautivó con su skyline desde que vi los primeros capítulos de la serie.
Seattle es una ciudad que se abre a sus visitantes por su espíritu innovador y acogedor, por su mezcla de tradición y modernidad, y por su conexión con la naturaleza.
Rodeada de montañas, bosques y agua, Seattle ofrece un espectáculo de colores y contrastes en cada estación del año. Puedes admirar el imponente volcán del Monte Rainier, las cumbres nevadas del Parque Nacional Olímpico o la bahía de Puget Sound, donde se avistan ballenas y focas.
Seattle también es una ciudad vibrante y creativa, cuna de la música grunge, el café y la tecnología. Cuenta con la emblemática Space Needle, una torre futurista que te regala unas vistas panorámicas impresionantes de la ciudad, o el Pike Place Market, un mercado lleno de vida.
Seattle tiene un lado artístico y alternativo, que puedes descubrir en el barrio de Capitol Hill, el centro de la comunidad LGTB y el arte urbano, o en el Museo de Arte Pop, donde se pueden ver exposiciones sobre música, cine y videojuegos.
Es una ciudad inspiradora que apuesta por la innovación y el desarrollo sostenible, con proyectos como el Seattle 2030 District, que busca reducir el consumo de energía, agua y emisiones de carbono en los edificios del centro, o el Seattle City Light, que provee electricidad 100% renovable a sus habitantes.
Panorámica nocturna desde el Parque Kerry
Tengo que reconocer que las ciudades no me atraen. Disfruto mucho más de los grandes espacios abiertos y de la conexión con la naturaleza. Pero si hay una silueta de ciudad que haya quedado en mi retina, es el skyline de Seattle.
Aprovechando mi segunda visita a la ciudad, con motivo de la EVAU de Laura, después del primer día de exámenes nos acercamos a Kerry Park con el fin de ver atardecer, y fotografiar el perfil de esta fascinante ciudad.
Pasada la hora azul, con la cámara sobre el trípode, tomamos esta foto y pusimos una cruz en la lista de sueños fotográficos por cumplir.
Ubicación de disparo
Aquí os dejo la ubicación exacta de este pequeño parque. Si visitáis Seattle alguna vez, no olvidéis pasar por allí. ¡Las vistas son espectaculares!
La imagen de «El Tesoro» iluminado a la luz de las velas quedó grabada en mi mente desde la primera vez que la contemplé, navegando por internet. Tal fue la impresión que me causó, que pasó a encabezar mi lista de deseos, esa que titulo «fotos soñadas pendientes» y en la que voy poniendo cruces poquito a poco, según voy cumpliendo años y, sobre todo, sueños.
Este sueño se hizo realidad en junio de 2019, gracias a mis amigos de Boreal Expedition. Raúl y Cristi nos propusieron formar parte de uno de sus grupos, que viajaba a Jordania, y no dudamos en aceptar.
Disfrutando de «Petra by Night»
Arrancamos nuestro viaje a Jordania visitando «Petra by Nigth». El evento tiene lugar después de que oscurece, y ofrece a los visitantes la oportunidad de experimentar Petra iluminado con miles de pequeños farolillos, que crean un ambiente mágico y misterioso, completamente diferente a la imagen diurna.
Imagina que caminas, al anochecer, por un angosta garganta, rodeado de altas paredes de roca que ocultan los secretos de una antigua ciudad. Solo la luz de las velas ilumina tu camino, creando sombras y reflejos. A medida que avanzas por el Siq, sientes la historia y el misterio que envuelven este lugar sagrado para los nabateos. De repente, el desfiladero termina y se abre ante nosotros una vista asombrosa: el Tesoro, se muestra con su impresionante fachada tallada en la roca.
El lugar es sobrecogedor. Nos invitan a sentarnos entre los visitantes, ofreciéndonos un té. Comienza un breve espectáculo de luz y sonido que cuenta la historia de Petra, mientras músicos beduinos tradicionales tocan instrumentos como la flauta y el tambor. Bajo mi punto de vista, la iluminación no acompaña el momento. Los focos de colores (azul, verde o rojo) que iluminan el Tesoro crean una escena artificial que no es acorde con el valor de este fascinante patrimonio histórico.
Los colores se apagan, la música cesa y el espectáculo termina con un momento de silencio. Es el preciso instante que aprovecho para levantarme y buscar una esquina dónde colocar el trípode y montar la cámara. Con paciencia, esperamos a que el resto de visitantes se levanten y tomen el camino de vuelta a través del Siq, mientras los vigilantes comienzan su ronda para asegurarse de que no queda nadie en la explanada. El imponente Tesoro permanece levemente iluminado por los cientos de farolillos y las miles de estrellas que inundan en el cielo jordano… ¡Es el momento perfecto!
Un par de minutos para ajustar ISO y tiempo de exposición, levantar el espejo y, presa de los nervios, usar el disparador… Los vigilantes llegan para pedirnos que abandonemos el lugar. Recojo cámara y trípode, con una sonrisa. Sé que llevo en la tarjeta de memoria la esencia de un lugar único.
Qué debes tener en cuenta si quieres contemplar Petra a la luz de las velas
«Petra by Night» se celebra solo algunos días a la semana, y solo en ciertas épocas del año, por lo que es recomendable verificar previamente la disponibilidad y horarios. Puedes comprobarlo en la página oficial
En verano, la ciudad nabatea está saturada. Evita los meses de mayor afluencia, y disfruta de un mejor clima durante la primavera y el otoño. Nosotros viajamos en junio, y aunque hacía calor, fue una experiencia muy satisfactoria.
Es muy recomendable planificar el viaje para empezar el recorrido viendo el Tesoro por la noche. Déjate sorprender por su belleza, y aprovecha para recorrer y disfrutar de la ciudad al día siguiente.
Acude con tiempo, para entrar pronto y disfrutar del recorrido a través del Siq.
No olvides llevar calzado cómodo para caminar. El kilómetro y medio de recorrido hasta el Tesoro se realiza en una media hora, de ida, y otra media hora, de vuelta.
Se recomienda llevar una botella de agua (no se puede comprar una vez estéis dentro), y alguna prenda de abrigo, porque refresca por las noches.
Es importante recordar que durante «Petra by Night» se prohíbe el uso del flash para tomar fotografías
¿Dónde comprar las entradas?
Las entradas se pueden comprar en el centro de visitantes de Petra, en las agencias de viajes locales o en la recepción de algunos hoteles. Las entradas no se pueden reservar con antelación, hay que comprarlas el mismo día. Es necesario tener una entrada válida para visitar Petra de día, o el Jordan Pass, para poder comprar la entrada de Petra By Night.
A fecha de hoy, el espectáculo se realiza los lunes, miércoles y jueves de cada semana, empieza a las 20:30 desde el centro de visitantes y dura unas dos horas.
Imagina un cielo nocturno estrellado sobre los campos de lavanda de Brihuega.
La Vía Láctea, esa inmensa franja de estrellas y gas que se extiende a lo largo del firmamento, se ve claramente como una especie de «río de estrellas» que atraviesa el cielo. Un espectáculo impresionante que quedará grabado en tu retina por mucho tiempo.
Fotografía tomada en 2019 gracias al EOS R System Tour, de Canon España, con Paco Farero e Iván Sánchez
La Vía Láctea
Cuando la noche cae sobre los campos de lavanda, y el cielo se vuelve oscuro, la Vía Láctea comienza a ser visible como una franja luminosa que se extiende desde el horizonte hasta el cenit. La Vía Láctea es nuestra galaxia, una inmensa estructura en forma de espiral que contiene miles de millones de estrellas, planetas, nebulosas y otros objetos celestes.
Al mirar hacia arriba, se pueden distinguir diferentes regiones de la Vía Láctea: el centro galáctico, que se encuentra en la constelación de Sagitario y es la región central más densa y brillante de la galaxia. También podemos observar varias nebulosas, regiones donde el gas y el polvo se concentran para formar nuevas estrellas. También podemos observar varias nebulosas, regiones donde el gas y el polvo se concentran para formar nuevas estrellas.
Los campos de lavanda de Brihuega
Para saber qué campos de lavanda se pueden visitar en Brihuega, lo mejor es informarse a través de la página web oficial del Ayuntamiento de Brihuega, ya que allí se publican las últimas noticias y actualizaciones sobre la apertura de los campos de lavanda.
Ten en cuenta que algunos campos de lavanda son propiedad privada y no están abiertos al público en general. En estos casos, es importante respetar la propiedad privada y evitar ingresar a los campos sin permiso.
Para llegar a los campos de lavanda, al llegar a Brihuega hay que cruzar el pueblo, y nada más salir, girar en la primera carretera hacia la derecha, la CM-2005. Puedes indicar en el GPS: «Campos de Lavanda CM-2005»
¿Cuándo se produce la floración?
La floración se produce entre finales de junio y principios de agosto. Si lo que buscas es disfrutar de la belleza y el aroma de la lavanda en su máximo esplendor, este sería el mejor momento para la visita. La siega suele realizarse a finales de julio o primeros de agosto.
Es importante tener en cuenta que las fechas exactas pueden variar de un año a otro y dependen en gran medida de las condiciones climáticas y de la propia floración de la lavanda.
Además, ten en cuenta que los campos de lavanda son una atracción turística popular, por lo que es posible que estén más concurridos durante los fines de semana y las horas pico. Si prefieres evitar las multitudes, quizás te convenga planear tu visita para un día de la semana o temprano en la mañana o al final del día.
¿Quién no se ha enamorado de este lago canadiense?
Recuerdo que, en mis años jóvenes, la pared de mi habitación estaba decorada con un póster de Moraine Lake. Levantar la vista y contemplar esa imagen era un recordatorio constante de mi anhelo por viajar. Sentía la llamada de la naturaleza, y la búsqueda de esa libertad que solo se experimenta con la aventura de viajar.
El Valle de los Diez Picos
Enclavado en lo profundo de las majestuosas Montañas Rocosas, en el Valle de los Diez Picos, el Lago Moraine es un espejo de aguas de un azul turquesa intenso que desafía la misma grandeza del cielo que refleja.
El lago está situado a unos 14 kilómetros al sureste del pueblo de Banff y se encuentra a una altitud de 1.884 metros sobre el nivel del mar. Tiene forma de media luna, y está rodeado de altas montañas con picos nevados que se elevan hacia el cielo, y bosques de coníferas en las laderas.
El lago Moraine es conocido por su belleza escénica impresionante, que lo convierte en el sueño de muchos viajeros, por lo que es uno de los lugares más fotografiados de Canadá. Yo pude poner la cruz en mi lista de ‘lugares que fotografiar’ en junio de 2018, durante mi primer viaje a los parques nacionales del norte de USA y Canadá a bordo de ‘Estela’, la furgoneta de mi querida amiga Manuela.
Esta fotografía es más que una imagen, es un recuerdo de una aventura inolvidable. Y una prueba inequívoca de que si puedes soñarlo, puedes lograrlo.
La mejor panorámica
Si sueñas con fotografiar esta maravilla natural, el mejor punto para hacerlo es siguiendo la ‘Rockpile Trail’: Esta es una ruta de senderismo corta pero empinada que te lleva a un mirador en una roca gigante en el extremo sur del lago. Desde aquí, la vista panorámica completa del lago y las montañas circundantes es absolutamente sensacional.
Existen también varios puntos a lo largo de la orilla del lago donde puedes llegar caminando, y encontrar ángulos únicos para fotografiar.
El color del agua
Los lagos glaciares a menudo tienen un distintivo color turquesa o azul verdoso debido a la presencia de partículas finas de sedimento conocidas como «harina glacial». Cuando el hielo glaciar se derrite, libera partículas de roca molidas en polvo fino, que flotan en el agua y la hacen parecer de un color distintivo.
Además, la luz del sol se refleja en la superficie del agua de manera diferente que en los cuerpos de agua más claros. La luz del sol tiene diferentes longitudes de onda, y las más largas, que son rojas, son absorbidas por el agua en mayor medida. Las longitudes de onda más cortas, que son azules y verdes, se reflejan en mayor medida, lo que hace que el agua aparezca de un color más azul o verdoso.
Cómo llegar a ‘Moraine Lake’
Para llegar al Lago Moraine, primero debes dirigirte a la ciudad de Banff en la provincia de Alberta, Canadá. Desde Banff, puedes tomar la carretera 1 hacia el oeste durante aproximadamente 14 kilómetros hasta la entrada del Parque Nacional Banff.
Desde la entrada del parque, sigue conduciendo hacia el oeste por la carretera 1 (también conocida como la carretera Trans-Canada) durante aproximadamente 8 kilómetros hasta la carretera de acceso al Lago Moraine. Esta carretera se llama Moraine Lake Road y está claramente señalizada.
Después de girar hacia la Moraine Lake Road, sigue conduciendo por la carretera durante unos 14 kilómetros hasta llegar al Lago Moraine. La carretera es una carretera de una sola vía sinuosa, con muchas curvas y subidas empinadas, pero ofrece vistas espectaculares de las montañas circundantes y del valle del río Bow.
Es importante tener en cuenta que el acceso al Lago Moraine es limitado y se controla el número de vehículos que pueden ingresar. Durante los meses de verano, la carretera puede cerrarse a ciertas horas del día debido a la gran cantidad de visitantes. Por lo tanto, se recomienda planificar con anticipación y llegar temprano para asegurar un lugar de estacionamiento y evitar las multitudes.
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